sábado, 29 de septiembre de 2012

Amarte o amar la fantasía


Ferhon : Los Dioses, con astucia han contradicho mi expectativa. Tanto es así, que remueven mi conciencia como si esta fuera una gota en el mar.
Meltor : ¡No culpes a la deidad de tus errores! No hay mayor virtud ni mayor error que el propio impulso individual, te hace, te hará ir hacia delante de la misma manera que te hará retroceder.
Ferhon : Dejé a un lado mi propia verdad, mi alma, quiera ésta enfrentarse o no a la consecuencia. Ella puso su mano en mi pecho, notaba su anillo frio y duro como una piedra endurecida por el tiempo.
Meltor : Se interpuso pues, entre tu conversación interior y tu razón exterior.
Ferhon : No quiso calmar a mi alma, tan sólo apartarme, alejarme de su propia historia interior, llenos-la de perturbadora normalidad, aparentemente de perturbadora frialdad.
Meltor : Si pudieras cambiar un hecho, respecto a tu dolor presente ¿Qué cambiarías?
Ferhon : Nada, esta es la verdad.
Meltor : Te mentiste y ahora no eres capaz de hacerlo de nuevo ¿Acaso no hay mejor momento que ahora, para mentirse?
Ferhon : Si mentirme desembocó en un sueño ¿Qué sentido tiene pues, ahora escribir un final, con la tinta de mi propia fantasía? Yo creé el comienzo y ella escribió el final, un final confieso, no esperaba, pero un final.
Meltor : ¿Los dioses, sentados, dirigiendo y viendo tu circunstancia, fueron quienes te impulsaron a ser creador de tal falso comienzo?
Ferhon : No, y si pensara tal cosa, dejaría de ser yo como me considero.
Meltor : Entonces, otorga pues, la auto-ria tan sólo de tu propia suerte a la persona que amas.
Ferhon : Sus motivos fueron...
Meltor : Sus motivos fueron de ella, tanto como los tuyos son de ti mismo.
Ferhon : Quisiera morir
Meltor : ¿Morirías porque un día vieras el mundo, personas, ideales, a ti mismo, de manera distinta?
Ferhon : No lo se
Meltor : Amarla te está alejando de la virtud, la virtud de poder verla como a ti mismo, con sus esenciales diferencias y grandes semejanzas.
Ferhon : Si participáramos de poder conformar un ideal en el cual, todos pudiéramos vernos como leyes iguales ante el sistema, perdiera-se para siempre lo que hoy somos.
Meltor : De igual modo que participas del amor para poder amar, y aun así, no fuiste igual para ella.